El Smart Working es un nuevo modelo de trabajo que dota al empleado de todas las herramientas necesarias para alcanzar un rendimiento profesional máximo en cualquier lugar. Con Smart Working, el trabajador tiene total autonomía y flexibilidad, tanto de ubicación como de horario: puede trabajar desde donde quiera (ya sea su casa, la oficina o cualquier otro lugar) con rapidez, acceso a la información necesaria y máxima seguridad. En español se traduce como “Trabajo ágil”.
El coronavirus trajo el teletrabajo. Debido al confinamiento, las personas se vieron obligadas a trabajar desde sus casas para mantener la actividad de las empresas. No hubo tiempo para hacerlo de forma planificada, y cada organización lo hizo como mejor supo, y en muchas ocasiones supuso importantes contratiempos. El más importante el relativo a las brechas de seguridad, sin olvidar las carencias en infraestructura informática: conexiones rápidas y dispositivos adecuados, principalmente.
Sin embargo, tanto las empresas como los trabajadores tuvieron ocasión de experimentar los grandes beneficios de esta modalidad de trabajar, por lo que el teletrabajo llegó para quedarse. Si antes de la pandemia el porcentaje de personas que teletrabajaban en España no llegaba al 8%, durante el confinamiento, este porcentaje superaba el 75%.
Las claves del Smart Working
El Smart Working supone un paso más allá del teletrabajo, y es un modelo que surge gracias a la fusión del trabajo a distancia con las nuevas tecnologías.
Para que el Smart Working se convierta en realidad requiere dos condiciones:
Confianza y objetivos. Como hemos comentado, en Smart Working los empleados disfrutan de total flexibilidad y autonomía en cuanto a ubicación y horario laboral. Pero esto no significa que puedan “dormirse en el sofá”. Por eso, este modelo de trabajo exige fijar tareas y objetivos de productividad a completar en un tiempo determinado.
Tecnología digital. Para que una persona pueda teletrabajar con agilidad y seguridad se requiere optimizar el uso de la tecnología digital. Por ejemplo, habrá que prescindir de todo lo que no pueda almacenarse en la nube, proporcionar conexiones rápidas y seguras desde cualquier lugar, y proteger la información, entre otros. La ciberseguridad adquiere en este contexto una importancia primordial.
Ventajas e inconvenientes del Smart Working
Los beneficios del Smart Working son realmente interesantes, pero como todo en la vida, también tiene contras. Veamos el resumen de los más relevantes.
VENTAJAS
- Por tratarse de un modelo basado en la consecución de resultados, aumenta la eficiencia y motivación de los trabajadores.
- Mejora la satisfacción y felicidad de los empleados
- Reduce costes para la empresa, como el alquiler de oficinas o las dietas de los empleados
- Reduce los costes de desplazamiento para los trabajadores
- Facilita la creación de equipos multiculturales y multidisciplinares, incrementando los niveles de diversidad y creatividad de la organización.
INCONVENIENTES
- La distracción de los trabajadores (por motivos ajenos al trabajo y relacionados con el lugar en el que desempeña sus tareas)
- Posible aislamiento de los equipos. Sin duda, compartir oficinas facilita la relación interpersonal de los trabajadores de una organización.
- No existe un marco regulador (por el momento en España)
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